Nos vemos el año que viene

Dicen que despedirse es como llorar por dentro,

que se moja el alma aunque por fuera estés entero.

Siempre tras una despedida viene un reencuentro,

solo espero que esta vez no tarde mucho tiempo...

Como decía un personaje verde con sombrero,

nunca digas adiós, pues significa olvidar,

y yo siempre te voy a recordar por cuánto te quiero.

Así que en esta despedida sólo diré hasta luego...

Peces de colores

Ay Noviembre, tú y yo, una vez más.

Qué historia la nuestra, ¡si supieran!

Pero no lo saben; es nuestra intimidad

la que guarda celosa en una pecera,

trocitos de mar tras el fondo de un cristal,

un montoncito de arena y piedras,

y muchos momentos que recordar:

un día fuimos peces de colores en el mar.

Si la vida me hubiese dado un océano...

pero tengo una pecera donde aún puedo soñar.

Flor de otoño

Tú y tus ganas de volar,

surcar los cielos,

no parar a descansar.

Yo y mis alas rotas,

mi saco de miedos,

y mis lágrimas para llevar.

Tú y tu sonrisa mágica,

tu paciencia inquebrantable,

y tu esperanza clásica.

Yo y todas mis excusas,

mi negatividad irremediable,

y mis explicaciones difusas.

Tú y tus soluciones,

tu llanto alegre,

que curaba frustraciones.

Yo y todos mis peros,

el quiere y no puede,

y en el cajón los te quiero.

Disculpa mis heridas,

siempre serás la primavera,

en el otoño de mi vida.

Tenemos tiempo, es día uno

Bailemos bajo la luz tenue de alguna farola,

estamos solos, se marcha todo el mundo.

Tenemos tiempo de sobra hasta la aurora,

ahora que bajo ese vestido no llevas escudo.